
No todas las listas van a seleccionar lo mejor del año. En Serielistas hacemos una selección de esas series que no son tan buenas, pero que tienen algo que sigue enganchando a la gente, pese a saber que no lo son.
No todas las series son obras maestras, ni tienen que serlo. A veces, ni siquiera son buenas, y tampoco pasa nada. Los gustos son muy diversos y a veces una serie que no es tan aclamada o valorada consigue sumar a muchísimos más seguidores que la mejor serie del año. Series que, pese a que somos capaces de reconocer que no son para tanto, tienen un yo que sé, que qué se yo que las hace irresistibles para nosotros. Los americanos las llaman guilty pleasures, “placeres culpables”, en castellano. Y nosotros hemos elegido las cinco mejores del año (en orden alfabético).
Los 5 mejores “placeres culpables” de 2022
- Cómo conocí a tu padre
- La monja guerrera
- La mujer de la casa de enfrente de la chica en la ventana
- Peacemaker
- Smiley
Cómo conocí a tu padre

Disponible en Disney+
Después de ocho años de espera, al fin llegó la esperada secuela de Cómo conocía a vuestra madre. Igualar el éxito de su antecesora era imposible, pero Cómo conocí a tu padre tampoco ha conseguido actualizar la historia romántica de Ted Mosby. La de Sophie es una apuesta continuista que no consigue despegarse de su antecesora y repite muchos esquemas. Y, precisamente por eso, funciona. A los que no les gustó la original en su día o ha envejecido mal para ellos, seguirá sin ser su serie. Pero, para los aficionados y a los que les gustan las historias de la búsqueda del amor verdadero (aunque algo actualizado), la serie sigue teniendo ese encanto, al que se le suma la nostalgia de los sorprendentes regresos de ciertos personajes.
La monja guerrera

Disponible en Netflix
La monja guerrera no es una gran serie, pero tiene ese algo por el que te haces una maratón de toda la temporada en dos tardes. O una. La serie de fantasía adolescente sobre una secta de monjas justicieras (cómo no va a ser un “placer culpable” esto) contaba con una legión de fans, pero no los suficientes para Netflix, que la canceló tras su segunda temporada. El fandom sigue presionando para que tenga una nueva vida, pero por el momento no hay noticias. ¿Nos van a dejar así ahora que teníamos “Avatrice”?
La mujer de la casa de enfrente de la chica de la ventana

Disponible en Netflix
Reconozco que he tenido que mirar el nombre en la web para escribirlo bien, no me escondo. Kristen Bell (Veronica Mars) protagoniza este thriller de suspense que parodia a este género. La protagonista es La mujer de la casa de enfrente de la chica de la ventana, y una noche presencia como su vecino la mata a través de dicha ventana. O no. Su tendencia a beber alguna copilla de vino más y su imaginación hará que dudemos de si ocurrió todo tal y como ella lo creyó ver. Si hubiese apostado con más valentía por ese toque de mamarrachismo que tiene, hubiese estado cerca de ser una de las series del año, pero quedó a medias.
Peacemaker

Disponible en HBO Max
El anuncio de que DC iba a desarrollar una serie sobre El Pacificador, el personaje de El Escuadrón Suicida, extrañó a la mayoría. El personaje de John Cena acabó siendo muy odiado por los espectadores, pero James Gunn tenía plena confianza en él. Y menos mal. Peacemaker es gamberra, irreverente, encantadora, sorprendente, mamarracha, violenta y muy, muy divertida. No viene a reinventar nada, sino a maximizar el difícil arte de molar. El luchador ha sido una de las gratas sorpresas del año gracias a su entrega a lo que el cineasta le pide y ahora solo esperamos que el reinicio del DCUE no afecte a la segunda temporada, que ya está siendo escrita.
Smiley

Disponible en Netflix
Smiley es la clásica comedia romántica de chico conoce a chica –chico, en este caso– con todos sus clichés, tropos y arquetipos. Y eso también está bien. La adaptación de la exitosa obra de teatro de Guillem Clua, que también está detrás de la serie de Netflix. La serie es lo que se puede esperar de este tipo de historias, tiene su encanto, te hace creer en el amor, tiene su momento dramático… La comunidad LGTBi también necesitaba de este tipo de referentes, y Smiley cumple a la perfección con ello.