
Filmin estrena la miniserie '22 de julio' sobre el atentado que en 2011 conmocionó a la sociedad noruega. La ficción, que ha sido todo un éxito en Noruega, busca respuestas a la masacre perpetrada por un simpatizante de la extrema derecha y fundamentalista cristiano en la que fueron asesinadas 77 personas.
El 22 de julio de 2011 es una fecha grabada a fuego en la memoria de los noruegos ya que aquel día sufrieron el mayor atentado terrorista de la historia del país. Un ataque que, en un principio se creyó obra de Al Qaeda, pero que rápidamente se atribuyó al verdadero autor, un simpatizante de la extrema derecha llamado Anders Behring Breivik. Filmin estrena la miniserie '22 de julio' sobre lo que sucedió en Noruega y que fue todo un éxito en el país tras su emisión en la televisión pública.
Qué pasó en Oslo y en la isla de Utoya
A primera hora de la tarde la explosión de una furgoneta bomba en el corazón político de Oslo donde se encuentran varias sedes del gobierno noruego acabó con la vida de ocho personas. Aprovechando el shock y el desconcierto Breivik aprovechó para dirigirse, haciéndose pasar por policía, a la isla de Utoya en la que se celebraba un campamento juvenil del Partido Laborista Noruego y donde al día siguiente se esperaba la visita del primer ministro, Jens Stoltenberg.

Allí, un par de horas después de la explosión en Oslo y armado con una pistola y un rifle, el terrorista tiroteó indiscriminadamente a los jóvenes acabando con la vida de 69 de ellos, muchos de los cuales fallecieron ahogados en un intento de huir de las balas. Al menos un centenar de personas resultaron también heridas en el segundo ataque.
El atacante fue detenido por la policía y juzgado apenas un año después en un proceso en el que fue condenado a la pena máxima de 21 años de cárcel, que puede prorrogarse a cadena perpetua.
Qué falló y qué cuenta la serie '22 de julio'
Aunque ya existen dos películas sobre la masacre, la miniserie 22 de julio que se estrena en Filmin propone un enfoque diferente y no se centra únicamente en el traumático suceso, sino que busca en el antes y en el después respuestas a la pregunta de qué falló.
Un mes después del atentado, una comisión independiente determinó que el doble atentado podía haberse evitado, especialmente el segundo ataque en la isla de Utoya. La falta de reacción de la policía permitió al ultraderechista conducir 40 km y llegar a la isla sin encontrarse con ningún control ya que no se había dado la voz de alarma. Además, las fuerzas de seguridad tardaron más de media hora en llegar a Utoya, desde el primer aviso desde la isla.
Basándose en exhaustivas investigaciones y en testimonios reales de los afectados, 22 de julio intenta arrojar luz sobre un suceso que dejó traumatizada a la sociedad noruega. También el trauma y cómo han cambiado los noruegos tras el suceso es objeto de análisis en la ficción en la que los protagonistas son todos aquellos que se vieron afectados en mayor o menor medida por el ataque, desde estudiantes, profesores, periodistas, médicos o policías.
